Este año Papa Noel ha sido generoso conmigo y ha leído la carta que le envíe ya que me trajo el Kingdom Hearts HD II.5 para PS3, un título que llevaba esperando desde hace mucho y, aunque tenga pendiente aún conseguir el I.5 HD, que no tardaré en adquirirlo, ya me he puesto manos a la obra con Birth by sleep, que en su día jugué en PSP, pero que siempre necesité jugar en consola “grande” y en esta ocasión, además, en HD.
Decir que el juego es ya de por sí excelente, pero la versión que PS3 es el Final Mix, que es una versión más extensa del juego con añadidos interesantes que le dan un poco más de dificultad y añaden atractivo a diferentes aspectos del juego. La adaptación gráfica de PSP a formato PS3 es absolutamente maravillosa, el proceso de remasterización ha dado sus frutos en una agradecida y nítida imagen que no deja ver los defectos de programación que podría haber, algo que sucede muy a menudo con las remasterizaciones de los juegos pues a mayor calidad, más nivel de detalle y mayor facilidad para que salgan a relucir los pequeños fallos.
Como digo, en este aspecto el juego es inmejorable y hacerlo más potente gráficamente implicaría tener que programarlo entero de nuevo. En este caso la remasterización HD es buenísima. El juego en sí es igual que su versión PSP, argumentalmente hablando no incorpora cambios, las principales diferencias radican sobre todo en la incursión de nuevos comandos y mini juegos entre otros detalles.
Por ejemplo, lo primero que llama la atención son los Nescientes, en este caso cambian de color respecto a la edición normal de PSP. En la misma eran bastante sosos, apenas una gama de 2 o 3 colores oscuros en la misma línea y poco detallados. En cambio, en esta versión de PS3 todos los Nescientes tienen unos diseños y colores propios haciéndolos más atractivos. Además, aparecen nuevos Nescientes a consecuencia de la incursión de nuevos mini juegos y pruebas extra.
Ese es precisamente otro de los añadidos, el juego incorpora nuevas misiones en el modo “Coso Virtual” como es el caso de la batalla contra “Monstruo”, la ballena de Pinocho, o un nivel de dificultad añadido en cada una de las misiones donde, además de completarlas, puedes también cumplir pequeños retos de bonificación para conseguir más medallas y puntuciones. Siguiendo en esta línea, todos los mundos disponen de unas misiones especiales a modo de retos que se incluyen en unos orbes oscuros ubicados en diferentes lugares de cada mundo.
Y precisamente las recompensas de esos retos son también algunos de los añadidos al juego ya que se incorporan nuevos comandos de apoyo que te permiten transformarte en Nesciente para usar todas sus habilidades. También hay algún nuevo estilo de comando, alguna síntesis especial que otorga comandos más raros que en la versión PSP y nuevos objetos y personajes para añadir a los informes del juego. Tal vez el único aspecto negativo que veo es que echo en falta más personajes de Final Fantasy.
Por lo tanto, toda una delicia jugar en PS3 a este juego, y aún me queda por degustar el Kingdom Hearts II en su versión Final Mix y visionar las cinemáticas de Re:Coded que seguro me harán flipar. Cuando las juegue, obviamente, lo comentaré de nuevo por aquí.
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